Producción de energía fotovoltaica a través de la instalación de paneles solares en un terreno con producción agrícola. Este binomio es posible y se llama Agrivoltaica. Una herramienta innovadora que pone de manifiesto que la producción energética y la producción agraria no discurren en caminos opuestos, sino que son compatibles hacia la consecución de la sostenibilidad. En estos momentos hay abierta una nueva línea de ayudas para la generación de energía renovable.

 

Según Carlos Gabaldón, “esta compatibilidad que se produce con la Agrivoltaica es muy interesante. Entre las ventajas que aporta, destacan un menor consumo de agua de riego gracias a las placas fotovoltaicas que permiten un sombreado parcial. Y, además, se convierte en una fuente adicional de ingresos para que los agricultores reinviertan en su terreno y aumenten su competitividad”.

De hecho, hay actualmente abierta una nueva línea de ayudas para la generación de energía renovable. Está dotada con 250 millones de € del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia (PRTR) y con ella se quiere impulsar proyectos innovadores como éste en todo el territorio español. El plazo para presentar las solicitudes finaliza el18 de noviembre.

Subvenciones hasta el 75%

“Es muy importante saber que las ayudas pueden rondar el 75% del importe de la inversión, excluidos los impuestos. Y otro aspecto muy importante es que no tiene por qué coincidir el titular de la explotación con el titular de la instalación de producción de energía”

Este uso simultáneo del suelo para producción agrícola y fotovoltaica puede realizarse sobre el terreno de varias formas. Por una parte, las placas fotovoltaicas pueden ir intercaladas en el cultivo o, por otra parte, dispuestas sobre el cultivo a una altura de dos o de cuatro metros.

Los beneficiarios de esta línea de ayudas para la generación de energía renovable con proyectos innovadores pueden ser, entre otras entidades, bodegas, cooperativas, SAT, industrias de cualquier tipo, ayuntamientos, comunidades de regantes, juntas centrales de usuarios de riego o mancomunidades de municipios. Respecto al plazo de ejecución, se extenderá hasta finales de marzo de 2026.

Otra de las ventajas que señala Carlos Gabaldón es “la posibilidad de utilizar para autoconsumo la energía producida o destinarla a la venta. En cualquier caso, nos ponemos a disposición de los interesados para resolver cualquier duda, ampliar esta información y valorar la viabilidad de su posible proyecto”.

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